Trail al más allá

¡Ah, la carrera del más allá ha llegado! Este Trail Running no es como cualquier otro, no, es una travesía entre los senderos de la muerte, donde la Catrina misma te espera en cada vuelta, guiñando un ojo tras los árboles y los cerros, marcando el ritmo con su abanico de huesos.

En el mágico escenario de la península de Yucatán, bajo el cielo que se tiñe de violeta en la noche de los fieles difuntos, se levanta este gran reto, donde vivos y muertos se entrelazan para recordar que correr es una celebración de la vida… y también de la muerte.

Cada corredor, como alma errante, trazará su destino entre senderos encantados, atravesando caminos que, dicen, fueron bendecidos por los antiguos mayas, custodiados por los cenotes, donde las sombras se funden con la brisa. Aquí no hay atajos ni descanso eterno; la carrera es veloz, el terreno desafiante, y la meta… bueno, la meta está en los brazos de la calaca.

Pero, ¡ay de aquel que no llegue con fuerza, pues la Catrina lo invitará a danzar bajo la luna, y su nombre quedará escrito en los altares, entre velas y flores de cempasúchil!

Corre, pues, valiente corredor, y desafía a la muerte en este tributo de carne, sudor y leyenda. Que los tambores del inframundo marquen el compás de tus pasos, y que, al cruzar la meta, no solo te lleves la medalla, sino también el pan y el pib, recordando que en este sendero, correr es honrar a los que ya se fueron… y a los que aún estamos por irnos.

¡Corre, vive y vence, antes de que te alcance la huesuda!